Oración a San Martín de Porres para pedir dinero urgente

En estos tiempos de aflicción y necesidad, elevo mi voz al cielo y mis pensamientos a ti, oh San Martín de Porres. En esta humilde plegaria, encuentro consuelo en tu presencia, buscando tu divina intercesión en medio de las tribulaciones económicas que enfrento. Mi corazón se inunda de esperanza al recordar tus actos de amor y generosidad.

Como un faro de luz en medio de la oscuridad, tú, San Martín, diste sin esperar recibir y ayudaste sin medida. Hoy, me postro ante tu gracia, reconociendo mi necesidad y mi fe inquebrantable en tus milagros. Te imploro, en este momento de incertidumbre financiera, que guíes mis pasos y escuches mi súplica.

No busco riquezas desmedidas ni lujos vanos, sino simplemente lo esencial para no carecer de nada y poder ofrecer apoyo a mis seres queridos. San Martín, humilde siervo del Señor, te confío esta carga que pesa sobre mí, sabiendo que estás dispuesto a ayudarme en mi hora de necesidad.

En estos momentos, la carga de preocupaciones que pesa sobre mí es grande,
y siento la angustia en mi corazón
debido a la falta de recursos económicos.

 

No pretendo la opulencia ni riquezas desmedidas,
sino solo lo necesario para no carecer de nada en mi vida
y para poder brindar sustento a mis seres queridos.

 

Como tú, San Martín, que diste sin recibir
y ayudaste desinteresadamente,
te encomiendo este difícil momento en el que me encuentro.

Anhelo que no falte un plato de comida en la mesa
donde se reúne mi familia.
Te agradezco por lo poco o mucho que tengo,
reconociendo que, a pesar de las dificultades,
siempre has estado presente en mi vida.

 

Sin embargo, en este momento, necesito una mejoría
para salir de todas mis deudas.

 

Te pido que, además de ayudarme en lo económico,
bendigas nuestra salud, ya que es vital
para mantener un trabajo estable
y poder garantizar el sustento de nuestros seres queridos.

 

Anhelo que coloques oportunidades de empleo
frente a todos aquellos que también las necesitan.

 

No permitas, San Martín de Porres, que me sienta desamparado
en ningún momento. Conoces bien mis necesidades,
y te escribo con desesperación en mi corazón,
sin encontrar soluciones ni auxilio por ningún lado.

 

Sin embargo, mi fe en tus milagros es inquebrantable,
así como cuando compartiste lo poco que tenías
con las personas necesitadas en la Tierra.

 

Hoy te suplico que tus manos intercedan en mi vida,
que me ayudes a superar este desconcierto financiero
que me envuelve. Agradezco por escuchar mis súplicas
y elevo mis peticiones no solo por mí,
sino también por mis familiares y seres queridos.

 

Que nunca les falte nada, ni en salud, ni en amor,
ni en prosperidad económica.

 

San Martín de Porres, te encomiendo a ti,
que fuiste un siervo humilde del Señor,
que llenaste los corazones de los necesitados
y consolaste a almas y cuerpos.

Obras miles de prodigios y milagros
para ayudar a quienes acudían a ti en busca de auxilio.

 

Te pido que seas mi intercesor ante Dios
para que me ayudes a superar esta grave crisis económica
que atraviesa mi familia. Dame, por favor, lo que tanta falta me hace en estos momentos.

 

Con humildad y dolor, te ruego que disipes de mi hogar
toda escasez y penuria. Que mis oraciones y súplicas
lleguen ante la Virgen y el Señor, quienes siempre están
llenos de compasión y misericordia.

Te imploro que me alcances tu espíritu de caridad y entrega,
para que yo pueda, a su vez, ser generoso con mis hermanos en necesidad.

Que, como tú, San Martín de Porres,
sepa hacer el bien a otros y seguir el camino de Jesucristo.

 

Si alguien más se encuentra en una situación similar,
lo invito a repetir esta oración diariamente durante nueve días
para encontrar guía en sus pasos y experimentar la sanación de sus finanzas.

Finalizamos esta oración acompañándola con un Padre Nuestro,
un Ave María y un Gloria, reconociendo la importancia de la comunión con Dios
y la intercesión de la Virgen María en nuestras vidas. Amén.

En este acto de fe, San Martín de Porres, te ruego que seas mi guía y mi protector en el camino hacia la superación de esta crisis económica que afecta a mi familia y a mí. Agradezco tu presencia constante en mi vida y te pido que sigas intercediendo ante el Señor en mi nombre.

Que tu espíritu de caridad y entrega ilumine mi camino y me inspire a seguir tus pasos, San Martín. Como tú, quiero ser generoso con mis hermanos necesitados y reflejar el amor de Jesucristo en mis acciones.

Al igual que esta oración se eleva al cielo, confío en que mis plegarias serán escuchadas y que Dios, en su infinita misericordia, guiará mis pasos hacia la prosperidad económica. Con fe, esperanza y gratitud, concluyo esta oración, sabiendo que San Martín de Porres intercede por mí y por todos los que buscan su ayuda en momentos difíciles. Amén.