Oración a San Charbel para conseguir trabajo

En momentos de incertidumbre, cuando la vida nos pone a prueba y nos encontramos en una encrucijada de emociones y decisiones, es cuando buscamos guía y consuelo en aquellos seres celestiales que han caminado por la tierra antes que nosotros. San Charbel, con su vida dedicada a la fe y al servicio divino, se presenta como un faro de esperanza para todos aquellos que lo invocan con un corazón sincero y humilde.

La oración es una herramienta poderosa que nos conecta con el divino, nos permite expresar nuestras inquietudes, agradecer las bendiciones y buscar dirección en nuestro camino. Cada palabra que pronunciamos lleva consigo la esencia de nuestras intenciones y deseos más profundos. La devoción a San Charbel nos brinda una oportunidad para renovar nuestra fe y reafirmar nuestra confianza en la guía celestial.

 

Oh venerado San Charbel,
A ti, intercesor ante
El majestuoso Señor de señores,
Rey de reyes, me encomiendo
En esta petición ferviente.

 

Necesitando tu auxilio para hallar
El empleo que deseo,
Un medio donde pueda crecer,
Desarrollarme como ser humano,
Cuidando y proveyendo a mi familia,
Con amor y pura dedicación.

 

Tú, que pasaste tus días
En la soledad de una ermita humilde,
Ajeno a las voces mundanas,
Sentado al lado derecho del Padre,
Desde tu morada silente entiendes
Nuestras necesidades y tribulaciones.

 

Escucha mi súplica,
Con tu corazón generoso,
Y tus brazos, siempre abiertos,
Acogiéndonos en cada momento.
Testigo de mis afanes, inquietudes,
Ansiedades y esperanzas.

 

Reconoce en mí a un hijo,
Que con fe y rectitud
Desea seguir el camino del Señor,
Obrando con misericordia y amor,
Creo en tu poder, aquel que cura,
Restaura, y provee con amor divino.

 

Oh Santo milagroso,
Que devuelves la luz a los ciegos,
Ofreces razón a los confundidos,
Con tu gracia sanadora auxilias
A quienes sufren y padecen.
Eres conocedor de lo profundo de mi ser,
Mis anhelos, sueños y preocupaciones.

 

Encomiendo a ti mi deseo de avanzar,
De crecer cada día, no solo materialmente,
Sino en salud, fortaleza y espiritualidad.
Ser útil, ser luz para quienes me rodean,
Reflejar tu bondad y la del Creador.
Prometo difundir tu devoción,
En gratitud por las bendiciones que otorgas.

 

Por último, más allá de lo terrenal,
En la eternidad junto a Cristo,
Busco paz y consuelo eterno.
Te imploro, San Charbel,
Que mi fe permanezca inquebrantable,
Que siempre vea el propósito divino,
Y al final, que tu intercesión guíe mi alma,
Al encuentro con el Señor.

Amén.

 

Una vez elevadas nuestras plegarias, es esencial que confiemos en el plan divino y reconozcamos que todo ocurre según el tiempo y voluntad de Dios. San Charbel, con su legado lleno de milagros y testimonios de fe, nos invita a ser pacientes, a mantener la esperanza y a actuar con amor en cada circunstancia. En esta vida terrenal, es inevitable enfrentar desafíos, pero la gracia divina siempre nos acompaña, ofreciéndonos fortaleza y guía.

Mientras continuamos nuestro viaje espiritual, recordemos siempre que no estamos solos. La intercesión de los santos y la presencia constante de Dios en nuestras vidas nos otorgan la paz y serenidad que tanto anhelamos. Que cada día, guiados por las enseñanzas y el amor de San Charbel, nos acerquemos más al propósito divino destinado para nosotros.

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